Las interfaces web responsive son aquellas que se adaptan su presentación de acuerdo al tamaño de la pantalla o si se miran desde un móvil, un ordenador o un tablet, por ejemplo.

Resizer es una herramienta de Google para ver y comprobar cómo rompe la interfaz web de una página, un blog o una aplicación. Todos tenemos la responsabilidad de hacer que nuestro producto sea accesible para todo el mundo explica Google en Introducing Resizer.

En Resizer se puede teclear o pegar una URL y automáticamente visualizar y comprobar cómo se verá en un ordenador, tablet y móvil, ambos en horizontal o vertical, en diferentes tamaños y tallas.

Como suele suceder con estas herramientas, su funcionamiento equivale más que nada a cambiar el tamaño de la ventana del navegador, no tiene en cuenta ni javascripts ni reglas de CSS que varíen el procesado de la interfaz, por ejemplo en base a la resolución de pantalla del dispositivo.

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